Las ventajas de reformar para vender
No es lo mismo vender una casa sin reformar que una casa reformada, para empezar la casa sin reformar siempre se vende a un menor precio que la que está reformada. Sin embargo, un piso reformado puede aumentar su precio de venta en el mercado hasta un 25%.
Por lo tanto reformar una casa no se traduce solo en gastar dinero, al contrario, estás mejorando la calidad de vida de tu vivienda usada para que los posibles compradores vean en ella una buena inversión y se decidan a comprarla.
Hay ciertas reformas que son imprescindibles para que la casa resulte atractiva a los futuros compradores:
- La puerta de entrada a la casa, ya que supone la primera impresión antes incluso de entrar en ella.
- La pintura, es fundamental que le demos una mano de pintura nueva a toda la casa preferiblemente en colores claros y neutros para dar amplitud y maximizar la luz natural.
- La cocina, que es una de las habitaciones a las que más prestan atención los futuros compradores, unos buenos muebles y unos electrodomésticos de calidad, que sean energéticamente eficientes, son fundamentales.
- El baño, la segunda habitación más importante para cualquier persona que compra una casa, hay que modernizarlo en el caso de que lo necesite o si está aceptable repasar los grifos baldosas, etc., y dejarlo a punto.
- El almacenaje, aprovecha la reforma para reestructurar el almacenaje o incluso crear espacios nuevos en los huecos vacíos que tengas, sobre todo en vertical.
Estas son reformas menores con las que puedes conseguir un gran cambio para tu vivienda, pero si además dispones de un buen presupuesto, también puedes plantearte cambiar los suelos, para conseguir un resultado uniforme en toda la casa, cambiar las puertas y las ventanas, para conseguir un buen aislamiento térmico y que además deje un aspecto más nuevo a la casa, incluso tirar tabiques para readaptar el espacio.
Se trata de invertir en la reforma para luego sacarle el mejor partido a tu vivienda pudiéndola vender más rápido y a mejor precio.